Representantes de las entidades Drets Humans, Aina Calafat, y del sindicato STEI-i, Gabriel Caldentey, acudieron la semana pasada a los diferentes actos organizados con motivo del Fórum Internacional Mundial, celebrado en la localidad de Belém (Brasil) y que arrancó con una marcha de inauguración a la que acudieron unas 90.000 personas, según cualificó la prensa local.
El Foro Social Mundial (FSM) es un encuentro anual que llevan a cabo miembros del movimiento por una globalización diferente, para organizar campañas mundiales, compartir y pulir las estrategias de reunión, y para que los diferentes integrantes se informen unos a otros de los nuevos movimientos existentes.
En esta edición, según recordó Aina Calafat, el principal eje temático del Foro Social Mundial giró en torno a la Amazonia y a la preservación de todo el patrimonio natural aún existente en el planeta, si bien este encuentro dio cabida a un gran número de movimientos de reclamación y protestas, caso del ataque de Israel sobre Gaza o el bloqueo estadounidense sobre Cuba, pasando por la participación de movimientos indígenas, pacifistas o gays, entre otros.
La asistente explicó que la primera jornada del foro se programó como el «Día de la Pan-Amazonia: 500 años de resistencia, conquistas y perspectivas afro-indígenas y populares», en la cual los organizadores pretendían «llevar al mundo las voces de la Amazonia» mediante la programación de diversas actividades, como testimonios, conferencias, así como celebraciones y exposiciones culturales.
Durante el resto de la jornadas se realizaron actividades de la misma naturalezas «auto-organizadas» por los distintos movimientos que participaron en este evento.
Durante la jornada del 1 de febrero, último día del foro, también se realizaron acciones «descentralizadas y auto-gestionadas» donde fueron presentados los acuerdos y alianzas construidos durante el Foro Social por distintos movimientos asistentes.