Un total de 389 personas, de 739 que presentaron su solicitud, han sido admitidas para participar en la última convocatoria del curso para la obtención del Certificado de Aptitud Pedagógica (CAP), el título que hasta ahora permite ejercer como profesor de Secundaria y Bachillerato, que dará comienzo en febrero. Ayer se publicaron las listas de admitidos.
Organizada por el Instituto de Ciencias de la Educación (ICE) de la Universitat de les Illes Balears (UIB), esta convocatoria extraordinaria se decidió ante la enorme demanda que se registró cuando se dio a conocer que a partir del 1 de octubre de 2009 el CAP será sustituido por el máster en Formació del Professorat, que será el único título válido que permitirá ejercer la docencia.
La UIB es una de las pocas universidades del país que han decidido ofertar una convocatoria extraordinaria para impartir el CAP. Por eso también presentaron su solicitud a esta última convocatoria personas de otras Comunidades.
La admisión de más o menos personas depende de la especialidad, pues está condicionada por el número de tutores existentes, y es que la ley exige que haya un tutor por cada dos alumnos y en algunas especialidades no hay suficientes especialistas disponibles, reconoce Lluís Ballester, director del ICE.
Las especialidades en que más personas se han quedado fuera han sido las de Economía y Administración de Empresas, Tecnologías o Informática y Enfermería y Servicios a la Comunidad.
Además, en previsión de un posible alud de solicitudes, como así ocurrió, el ICE decidió priorizar, a la hora de las admisiones, a aquellas personas que se preinscribieron en la convocatoria ordinaria de septiembre de 2008 y que no fueron admitidas.
Y es que con el nuevo máster -obligatorio en todo el Estado- las 300 horas (presenciales y prácticas) se convertirán en 1.500 (900 de ellas presenciales), que se cursarán a lo largo de 34 semanas. Con estas nuevas condiciones, explicó Ballester, «no será posible compatibilizar el máster con un trabajo y además, al acabar a finales de julio, el alumno no podrá presentarse a las oposiciones de la Conselleria d´Educació de ese mismo año, pues se celebran meses antes». En contrapartida, añadió, «la formación de los nuevos docentes ganará en calidad, será más competitiva y sólo entrarán los mejores expedientes, lo que deberá dar resultados a medio plazo».