La Seu acogió ayer la tradicional misa solemne con motivo de la festividad de Sant Sebastià, patrón de Palma. El obispo de Mallorca, Jesús Murgui, fue el encargado de oficiar el acto, que siguió el mismo esquema de años anteriores.
Algunas de las principales autoridades de las Islas también quisieron estar presentes en el oficio religioso. Así, la corporación municipal, encabezada por la alcaldesa de Palma, Aina Calvo, estaba prácticamente en pleno. Destacó la ausencia del teniente de alcaldesa de Benestar Social, Eberhard Grosske.
En representación del Govern acudió su portavoz, Joana Barceló. El conseller de Turisme y presidente de UM, Miquel Nadal; y la presidenta del PP, Rosa Estaràs, también estuvieron presentes.
Por parte de las Fuerzas Armadas asistieron el comandante general de Balears, Juan Carlos Domingo; el delegado de Defensa, Cristóbal Sbert; el jefe del Sector Naval, José María Urrutia; y el jefe del Sector Aéreo, Manuel Fernández-Roca.