Sus majestades los Reyes Magos de Oriente recorrieron ayer en tiempo récord los diferentes pueblos de las Islas cumpliendo con la tradición de repartir regalos a los más pequeños a bordo de vistosas carrozas.
Los Reyes llegaron por mar al Port de Pollença, Alcúdia y Can Picafort para desplazarse ya por tierra hacia los pueblos de interior. No se olvidaron tampoco del transporte público y tal y como han hecho en los últimos años eligieron el tren para llegar a localidades como sa Pobla o Manacor.
La capital de la comarca del Raiguer recibió puntualmente a los Reyes en la barriada de Crist Rei donde iniciaron su tradicional recorrido por la zona peatonal de Inca en dirección al Ajuntament.
Como marca la tradición concluyeron su recorrido, ya entrada la noche representando la adoración de los Reyes Magos rememorando así ante los ojos de niños y mayores el inicio de una tradición de más de 2.000 años.
En Manacor, Melchor, Gaspar y Baltasar llegaron en tren ante una multitud que les esperaba en el complejo de la estación. Miles de niños, llenos de emoción, recibieron a sus Majestades con todos los honores. La comitiva real recorrió las principales calles de la ciudad para dirigirse hacia la Església dels Dolors para realizar la tradicional adoración del Niño Jesús, entre caramelos, bengalas u juguetes empaquetados en las carrozas que los acompañaban.
En Vilafranca y Sant Llorenç, los Reyes Magos también fueron recibidos con una gran expectación. Y es que los más pequeños vivieron con extrema ilusión su llegada entre caramelos.