Más de 200 trabajadores se movilizaron ayer por el centro de Palma en defensa de la ocupación del sector aéreo y de los salarios. Los manifestantes entregaron una carta en el Consolat en la que reivindicaban un plan estratégico para hacer frente a la difícil situación por la que atraviesa el sector. Además, instaban al Govern a crear una submesa del transporte aéreo en la que estén representadas todas las partes del sector. En Balears se han producido unos 1.700 despidos en el sector aéreo durante 2008, a los que hay que sumar los fijos discontinuos.
Desde CC OO, Carmen Díaz de la Jara propuso que las Islas sean un centro de formación aérea. Además, repasó la situación del sector, que ha estado marcada por el concurso de acreedores de Futura, los expedientes de regulación de empleo (ERE) de Spanair y Futura y por la incertidumbre de los trabajadores de LTE que están a la espera de que la compañía presente el concurso de acreedores y el ERE. La responsable del sector aéreo de CC OO también citó la posible fusión de Iberia con British Airways, de la que le preocupa mucho la deuda. Los representantes de CC OO, UGT y USO solicitaron a las administraciones que vigilen la aparición de nuevas aerolíneas. «Algunas compañías cierran y al día siguiente aparecen con otro nombre y contratan a trabajadores con salarios más bajos», denunció desde USO Jaume Grimalt.
Ante este panorama, que los sindicatos auguran que empeorará en 2009, Díaz de la Jara anunció que se están planteando la posibilidad de convocar una huelga sectorial a nivel nacional. Sin embargo, el responsable del sector aéreo de UGT, Llorenç Dolç, matizó que primero hay que agotar la vía de diálogo que están desarrollando ahora, pero advirtió que «el día que se interrumpan las reuniones no nos quedará más remedio que ir a la huelga».
La concentración de ayer no fue tan numerosa como se esperaba y transcurrió por las calles de Palma en un silencio casi sepulcral. El desánimo y la desesperanza impera entre los trabajadores del sector aéreo, que están atravesando una situación crítica. Así, dos trabajadores del departamento de operaciones de LTE explicaban que llevan sin cobrar desde septiembre y a algunos compañeros les están embargando sus casas y a otros les están cortando la luz y el gas. Además, criticaban que la empresa incumple los plazos que marca el Ministerio de Trabajo y la Administración no hace nada para remediarlo. «Que nos dejen irnos al paro, al menos para poder comer», declaraban.
En medio de este panorama desolador se abre una puerta a la esperanza, ya que unos 70 trabajadores de Futura están trabajando para crear una compañía aérea que se llamaría Illes Balears Airways. Los trabajadores ya han pedido al Govern que les adelante las prestaciones por desempleo y esta semana han mantenido contactos con empresarios de las Islas, a través de la Cámara de Comercio, que están interesados en invertir en el proyecto. Los trabajadores insisten en la necesidad de poner en marcha este proyecto lo antes posible, ya que han recibido cartas de touroperadores que están interesados en volar con ellos este verano. En principio, la nueva aerolínea tendría entre dos y cuatro aviones y no llegaría al centenar de trabajadores.