oce trabajadoras del 061 se han desnudado para una calendario solidario con ASPAYM, Asociación de lesionados medulares y grandes discapacitados.
Son mujeres anónimas, que a lo mejor algún día, cuando han llamado al 061, les han solventado la papeleta propia de la urgencia. Mujeres que pertenecen al departamento de operadoras de emergencia y al que gestiona recursos, como tener a punto una ambulancia, un médico o cualquier cosa necesaria en una emergencia. Pero, sobre todo, son mujeres de gran corazón. Porque, ¿qué ganan ellas con este posado tan espectacular? Nada. Pero sí contribuyen a una buena causa. Ellas son Raquel, Silvia, Paqui, Yasmina, Cristina, Mar, Noelia, Yolanda, Rosa, Laura, Micaela y Rebeca.
Marian Mijarra, miembro del 061, que no participa en el calendario, «pero que al ver lo bonito que ha quedado, me he arrepentido de no hacerlo», nos contaba que la última en decidirse a posar fue, precisamente, la que ilustra el mes de Enero, Raquel, y que algunas han preferido que no les vieran la cara. En cambio, otra, mujer de un policía local para más señas, contaba que «mi marido está encantado, tanto que enseña el calendario».
A decir verdad, todo comenzó con una broma, a la que siguió el «¿y si nos atreviéramos...?». «Así que pusimos un cartel en la oficina para que quien quisiera se apuntara... y a decir verdad, la cosa tuvo éxito, pues enseguida contamos con bastantes voluntarias, no todas, pero sí bastantes. El resto fue cuestión de esperar un poco hasta que estuvieron las doce, una para cada mes».
Ni que decir tiene que problema de confianza que pudiera surgir entre la modelo y los fotógrafos se resolvió de inmediato, «pues a nada que nos conocimos hubo buen rollo y mucha confianza. Hombre... puede que alguna, al principio, se mostrara un poco retraída, pero enseguida pasó».
Y es que la modelo, desde el primer momento, estuvo desnuda. Porque, para qué demorar, ¿no? Porque al fin y al cabo, la foto que se pretendía era de un desnudo de mujer. «Por cierto -apunta Miriam- en este calendario todo es natural, nada de retoques, eh. Y desde luego: para nada se ha utilizado el photoshop. El buen resultado solo hay que buscarlo en las modelos y los fotógrafos. Y, a decir verdad, ha quedado muy bien. Acabamos de sacarlo a la calle y ya llevamos vendidos más de doscientos. ¿Que si el desnudo vende...? Por supuesto que vende, y más, si como estos, están bien hechos. Aunque mirándolo bien, en este caso el desnudo es lo que menos importa. Lo que vale es la causa por la que se han desnudado».
El trabajo duró alrededor de mes y medio. «Nos tomamos nuestro tiempo, sobre todo en localizaciones de escenarios para las fotos.... ¿Que cómo se hicieron éstas? Opinando todos, pero dejando que las modelos, a las que se les dio todo el tiempo que quisieran para posar, expusieran sus ideas. Por supuesto, unas lograron hacerse la foto más deprisa que otras».
Los fotógrafos reconocen que «pese a no conocernos, funcionó todo muy bien desde el principio. A medida que les hacíamos las fotos, las veían, y entre las que seleccionamos, ellas fueron las que eligieron las que se han publicado».
Para el final, la pregunta del millón. ¿Qué han opinado los jefes del calendario? «Como jefes, no opinan -asegura Marian-, pero, particularmente, consideran que el calendario está muy bien logrado».
lPedro Prieto
Fotos calendario: Mar Clar/Daniel Sampedro
Fotos reportaje: Julián Aguirre