PEP MATAS
Maletas, telas, champiñones chinos, sedas, zapatos, joyas... Antònia Ordinas no reparaba en gastos personales cuando viajaba a China. Después, en Palma, presentaba todos esos gastos como «de representación» y en la consellería de Comerç se los abonaban sin ningún tipo de problema y, por lo que se deduce ahora, sin el más mínimo control. En total, la gerente del CDEIB cobró catorce mil euros por estos conceptos. Así se señala en el resultado de las comprobaciones de los pagos y las facturas que Ordinas entregó en la consellería que presidía Josep Cardona. Como ya se informó en estas páginas, en ocasiones Ordinas añadía un cero a la derecha en recibos de taxis, y en otras presentaba al cobro recibos por cambio de moneda.
Todas estas irregularidades se detallan en un informe que se incluye en el sumario del caso. En total, sólo en sus viajes a China, Ordinas defraudó un total de 139.460 yuans, lo que al cambio suponen 13.946 euros. Para aclarar las cuentas se contrataron los servicios de un intérprete chino.
En el informe se especifica al detalle la manera cómo maquilló Ordinas los gastos. Así, por ejemplo, presentó al cobro tres facturas por la compra de zapatos, ocho por telas, una por prendas de seda, y otra por «adornos».
En el informe, en el cual figura la cantidad total de los gastos de la gerente del CDEIB en el país asiático, se separan los irregulares y se anota el motivo del engaño. En uno de estos apartados, en el que consta que se han pagado 2.500 yuans por «telas», se anota que «se trata de un artículo personal. El importe en chino es de 500 yuans. En número es 2.500 yuan. Modificado a mano».