La vida de la ensaimada se alargará hasta 28 días, en el caso de la de cabello de ángel, y 14 días, en el de la lisa, gracias a un nuevo envase de atmósfera modificada que las conserva con su máxima calidad. El proceso consiste en que una vez que están elaboradas las ensaimadas se dejan enfriar y posteriormente se introducen en un plástico denominado film de barrera. Acto seguido se colocan en una máquina de envasado que extrae el aire e introduce una mezcla de gases, que impiden que proliferen organismos. Finalmente, se procede al sellado del plástico.
Estas máquinas van conectadas a bombonas de gas y son similares a las de envasado de embutidos. La principal diferencia es que el envasado de las ensaimadas se tiene que realizar manualmente para no deteriorar el producto.
El Butlletí Oficial de les Illes Balears (BOIB) publicó el pasado 9 de septiembre la autorización para comercializar la ensaimada mediante el envasado de atmósfera modificada.
Las empresas interesadas en comercializar las ensaimadas con este envasado tienen que solicitar permiso al Consell Regulador de la Ensaimada. Aunque ya hay empresas que cuentan con esta máquina y pueden comercializarlas, aún no ha trascendido el nombre de ninguna de ellas.