LAURA MOYÀ
Durante los últimos meses, la negociación que el Govern está manteniendo con el Gobierno central para cerrar el nuevo sistema de financiación ha marcado la actualidad económica. Sin embargo, no es la única institución que contará con un nuevo modelo en 2009. El Consell también deberá tener una financiación diferente a la actual para hacerse cargo de las nuevas competencias que recibirá del Ejecutivo cuando se desarrolle el Estatut. El Departament d'Hisenda, que dirige Antoni Alemany, está trabajando en la propuesta que la institución insular presentará al Govern y que basará en un concepto: la suficiencia financiera. Para conseguirla, pedirán participar de los impuestos del Govern para lograr aumentar la partida del gobierno autonómico en otros 100 millones más al año.
Los objetivos del Consell son tres. Por una parte, «garantizar el ejercicio de las competencias propias», según el conseller insular d'Hisenda. Por otra, «asegurar la igualdad del servicio», que «ninguna isla quede por debajo de la otra». Por último, la institución insular propondrá otra novedad: «Incluir un fondo de compensación entre Islas para evitar las posibles diferencias», dijo Alemany. De esta manera, se pondría en marcha lo que ya existe a nivel estatal, el fondo de solidaridad, es decir, una partida que se destina a la financiación de gastos de inversión, con el fin de reducir desigualdades de renta y riqueza entre comunidades autónomas.
La propuesta busca dejar de lado el sistema actual de coste efectivo o, lo que es lo mismo, cuantificar cuánto vale un programa y traspasar esa cantidad del Ejecutivo al Consell. «Nuestra finalidad es participar de la recaudación de los impuestos del Govern con un tanto por ciento fijo para, así, lograr autonomía financiera», aseguró Alemany. La aportación del Ejecutivo no se distribuirá por áreas, como sucede en la actualidad, sino que será la institución insular la que decida cómo dividir y repartir el dinero entre sus diferentes departamentos. «Sabemos que el Govern debe cerrar primero el acuerdo con el Gobierno central, de ahí que desde el Consell no presionaremos en exceso hasta que se consiga el pacto con Madrid», explicó Alemany. Sin embargo, «sí insistiremos en que la mejora tenga carácter retroactivo».
Otro de los objetivos del Consell es mejorar la aportación del Gobierno a través de una segunda vía: la Federación Española de Municipios y Provincias. Las mejoras que se obtengan se destinarán, automáticamente, a actuaciones de ayuda a los ayuntamientos.
¿Los presupuestos de 2009 incluirán los incrementos de la nueva financiación? «De momento, elaboraremos unos presupuestos que no contemplen las mejoras. Después, cuando se concrete el modelo, se incorporarán las nuevas partidas, que se repartirán entre las áreas del Consell», según Alemany. En 2008, la institución insular tuvo un presupuesto de casi 340 millones, partida que incluye la primera aportación de 20 millones del Govern para mejorar la red de carreteras secundarias y otros 25 millones, también del Ejecutivo, para tapar el agujero dejado por s'Institut. Para el año que viene, los presupuestos volverán a potenciar las políticas sociales.