El coordinador de Esquerra Unida, David Abril, condenó ayer en la sede del partido en Palma, las declaraciones del ministro de Trabajo e Inmigración Celestino Corbacho, donde éste último manifestó la decisión de reducir la contratación de origen de los inmigrantes como medida para paliar el aumento de las cifras de desempleo en España.
Abril calificó al ministro Corbacho de ignorante, ya que «sus declaraciones indican un desconocimiento del funcionamiento del sistema de contratación en origen pues sólo se recurre a la misma cuando los cupos no son cubiertos por trabajadores de aquí». El cierre de los contratos de origen supondría además una «amenaza clara y seria de la convivencia en la sociedad española en la que el 20% de la población es inmigrante», aseguró el coordinador de Esquerra.
Asociaciones de inmigrantes lamentaron igualmente la política del Gobierno central; Mustafá Boul Arrak, representante de la asociación Al Magreb manifestó también su malestar asegurando que «el Gobierno fomentará la economía sumergida y la inmigración ilegal, con lo que el Estrecho se llenará de pateras». Según Boul Arrak esta medida allanará el terreno para una futura reforma de la Ley de Extranjería, que «prevé minimizar los derechos de los inmigrantes». El representante de Al Magreb añadió además que «sectores como el de la agricultura se sobreviven gracias a la mano de obra inmigrante por lo que este colectivo constituye una parte fundamental en la economía española».