Los macianers son expertos en sorprender y en iniciar fiestas que luego hacen escuela. La mayor sorpresa de este año ha sido la aparición de un 'ensierro' del que nadie sabía nada en el programa de fiestas. Un encierro que tuvo lugar ayer por la mañana y que transcurrió de una forma muy particular. Sus normas obligaban a respetar a los animales y correr detrás de ellos. Y es que los participantes no sólo corrieron acompañando a los toros sino que también persiguieron un asno y una manada de cabras. Tres divertidas carreras de poco más de un minuto sirvieron para hacer reír tanto a los corredores como a los espectadores que llenaban las calles del pequeño pueblo. Unas risas que pusieron el punto y final al 'ensierro' que los macianers dedicaron a San Roque.
Joan Sitges