Ayer por la tarde cerca de las 20.15 horas el autobús número 3 de la EMT que iba desde Illetes hacia el Pont d'Inca sufrió una avería en el momento que comenzaba a salir del túnel de las Avenidas que accede a la calle Aragón. El bus quedó parado en mitad de la cuesta con los pasajeros dentro.
Catalina C. era una de las una de las viajeras que iba en el bus y cuenta como a la altura de plazade España se empezó a escuchar una especie de traqueteo que venía del centro del autobús. «No sabíamos lo que era, pero hacía mucho ruido», dijo.
Cuando finalmente el vehículo se detuvo a la subida de la cuesta, Catalina recuerda que fueron los peores momentos porque el aire del segundo vagón -se trataba de un vehículo articulado- no funcionaba, y «pese a que estaban abiertas las ventanillas empezó a hacer mucho calor», y la incertidumbre rondaba entre los pasajeros pues «no sabíamos cuánto tiempo íbamos a estar dentro y el chófer dijo que no abriría las puertas hasta que no viniese la Policía».
Por su parte, Margarita G. recuerda que «a medida que avanzaba el tiempo la gente empezaba a llamar con sus móviles para contar lo que estaba pasando». La tensión de aquellos «largos veinte minutos» hasta tuvo un punto de leve histeria cuando alguien empezó a gritar que salía humo de la parte de atrás y «todos lo que ocupábamos la parte trasera empezamos a movernos hacia adelante, y es que en el bus estaban ocupados todos los asientos y había bastante gente de pie», añade Margarita.
El conductor número 8573 contó que en cuanto empezó a subir la cuesta del túnel «el bus ya no podía andar más». El conductor no supo responder a cuál era la avería exacta, «no soy mecánico» respondió a la pregunta.
El chófer aseguraba que sólo habían estado parados diez minutos y que no abrió las puertas porque «no podía dejar que los pasajeros se bajasen a su aire y que luego alguno sufra un accidente, en cuanto se paró el bus llamé a la Policía a que vinieran ellos a desalojar», afirmó. Como anécdota a añadir al suceso, una chica que iba en el bus descubrió, antes de llegar a la plaza de España, que un hombre le estaba intentado robar la cartera. El 'pillado' se bajó en cuanto pudo.