La Asociación de Padres de Familia Separados (APFS) presentó ayer ante el juzgado de guardia de Palma una denuncia contra una agencia de seguridad por el trato recibido durante un acto reivindicativo en la escultura Bou, de Santiago Calatrava, que se encuentra en Es Baluard.
En la denuncia, se recoge que «al finalizar el acto reivindicativo, dos vigilantes de seguridad pretendieron impedir que el padre manifestante abandonara el recinto pacíficamente». El documento recoge que los vigilantes, «sin que mediara agresión ninguna» por parte del padre, utilizaron «la fuerza, empleando sus porras y persiguiendo al padre por la vía pública».
En la demanda se afirma que «uno de los vigilantes no estaba debidamente identificado», presumiéndose que «se trataba de un vigilante auxiliar no titulado». Además, «una vez de vuelta Es Baluard, los vigilantes aludidos desaparecieron haciendo imposible su identificación». Posteriormente, «se presentó una unidad móvil de la empresa, a cuyo conductor se le comunicaron los hechos acontecidos sin que mediara en el conflicto».