La presidenta de Emaya, Cristina Cerdó, de UM, confirmó ayer que la empresa municipal transformará el antiguo vertedero de Son Reus en una zona verde, proyecto que, en principio, estará listo a mediados de 2010.
Cerdó hizo este anuncio en la visita que llevó a cabo a Son Reus, en donde recordó que el antiguo vertedero será cerrado a finales de este mes de junio.
De momento, y hasta que no estén listas las dos nuevas líneas de incineración que permitirán absorber todos los residuos generados en Mallorca sin tener que recurrir al vertido, se hará servir un nuevo vertedero de emergencia situado junto al actual, construido específicamente para dar este servicio.
Este nuevo vertedero, que el Consell ha cedido a Cort, ha sido construido por Tirme. Su vida útil será de 35 años, y durante este tiempo podrá absorber hasta 1'5 millones de metros cúbicos de residuos, ya que su depósito impermeable tiene una superficie de 91.201 metros cuadrados. El coste de esta infraestructura ha sido de 12'7 millones de euros.
Durante su visita a Son Reus, Cerdó estuvo acompañada por el primer teniente de alcalde, Miquel Nadal; la consellera de Medi Ambient del Consell, Catalina Julve, y el director general de Qualitat Ambiental de la Conselleria de Medi Ambient, Josep Lliteres, entre otras personas.
El antiguo vertedero, con una superficie ocupada de 247.300 metros cuadrados y una altura de 30 metros, será cubierto con diversas capas impermeabilizadoras, con las cuales se garantizará un aislamiento adecuado. Posteriormente, se plantarán ejemplares de vegetación autóctona para la creación de la citada zona verde. Esta actuación tendrá un coste global de 10 millones de euros, de los cuales ocho millones serán aportados por Fondos de Cohesión de la Unión Europea.