La Agencia Tributaria recaudó en Balears 2.719 millones de euros en el año 2006 por la totalidad de impuestos, lo que supuso un crecimiento del 13'7 por ciento respecto al año anterior, una tasa que se mantuvo durante el año pasado, todavía no cerrado, según anticipa el delegado de la Agencia Tributaria en las Islas, Raúl Burillo.
La Agencia Tributaria atribuye estos niveles de crecimiento de recaudación a la mejora de la actividad económica registrada en los últimos años en las Islas y a la mayor eficacia de la lucha contra el fraude fiscal, además de los efectos inducidos del Plan de Prevención del Fraude puesto en marcha hace unos años por el Gobierno central.
El último informe de recaudación del Ministerio de Economía y Hacienda indica que la mayor partida de recaudación la generan los impuestos directos, sobre todo el Impuesto de la Renta de las Personas Físicas (1.311'3 millones de euros en la campaña fiscal 2006) y el impuesto de sociedades (630'9 millones).
El delegado de la Agencia Tributaria en las Islas atribuyó el crecimiento de la recaudación por IRPF, del 16'2 por ciento, a la mejora de la actividad económica y al efecto inducido de las medidas de control que han hecho que muchos contribuyentes hayan comenzado a declarar rendimientos que antes no declaraban, caso de ingresos de alquileres o por transacciones inmobiliarias.
La explicación es la misma en cuanto a la evolución del impuesto de sociedades, que en 2006 registró el mayor crecimiento de recaudación de la totalidad de tributos en las Islas (30'7 por ciento). Hubo mayores beneficios y mayores controles de contabilidad.
La recaudación generada por el resto de tributos directos fue sensiblemente menor como consecuencia de su propia naturaleza. El impuesto de la renta de los ciudadanos no residentes (extranjeros que residen en Balears más de seis meses al año) generó una recaudación de 63'2 millones de euros, un 15'4 por ciento más que en el año anterior, mientras que el impuesto sobre el patrimonio aportó 2'9 millones de euros a las arcas públicas, un 8'6 por ciento menos que en el año precedente.
Impuestos directos
El más importante de los tributos directos es el Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA), el cual generó una recaudación de 604'5 millones de euros en Balears en el ejercicio fiscal 2006, con una leve caída del 0'9 por ciento respecto a 2005, una estabilización que el delegado de la Agencia Tributaria en Balears atribuyó al crecimiento habido en el año anterior, dado que el consumo no experimentó una caída importante en 2006.
El otro gran grupo de impuestos directos, ligados a las compras (consumo) de los ciudadanos, son los denominados impuestos especiales. Estos tributos, que graban las bebidas alcohólicas, hidrocarburos o tabacos, entre otros, aportaron a las arcas públicas unos ingresos de 15'71 millones de euros, lo que en este caso supone un descenso de 5'3 millones en relación a la campaña fiscal 2005.
Por último, la Agencia Tributaria recaudó otros 15'6 millones en concepto de «tasas y otros ingresos», una partida que incluye sanciones tributarias, intereses de demora y tasas diversas. En este caso los ingresos aumentaron un 13'7 por ciento.