La conmemoración del Día del Libro se ha convertido en una auténtica fiesta en favor de la cultura, aunque también es la razón principal para dar a conocer las últimas estadísticas respecto a los índices de lectura. En este caso, los datos aportados por la Conselleria d'Educació i Cultura son desalentadores por lo que hace referencia a Balears, toda vez que sólo el 57 por ciento de la población de las Islas admite que lee y de éstos sólo una quinta parte lo hace en catalán. La propia consellera Galmés advierte que este escenario está distorsionado en buena medida por la inclusión, por parte de los estudiantes, de las lecturas escolares obligatorias. Al final resulta que sólo un 30 por ciento de los ciudadanos puede considerarse lector habitual, es decir, más de cuatro libros al año.
Un plan de fomento de la lectura ha sido diseñado desde la Conselleria para tratar de paliar este constante descenso del interés por la palabra escrita, el cual plantea diversas medidas destinadas a recuperar el interés por la creación literaria. Además, se ha encargado al Instituto Balear de Estadística una completa encuesta sobre los hábitos de lectura en Balears.
La tarea de recuperar la pasión por los libros es, en estos momentos, titánica frente al constante avance de los medios audiovisuales, los cuales cada vez captan más adeptos, precisamente, entre el público más joven. Llama la atención que, sin embargo, las editoriales y las publicaciones de libros "incluso en catalán" aumentan año tras año. Es por esta razón que es conveniente analizar en profundidad el fenómeno, sus causas y establecer mecanismos destinados a una fructífera convivencia entre los distintos medios culturales si, en realidad, el plan dado a conocer desde la Conselleria d'Educació i Cultura no se quiere que acabe en un mero anuncio de buena voluntad.