El IB-Salut y el Sindicato Médico no fueron capaces ayer de alcanzar un acuerdo que permitiera desconvocar los 29 días de paros convocados por la organización sindical para conseguir mejoras salariales y profesionales para los médicos de la sanidad pública balear.
Ambas partes en conflicto se reunión dos veces durante la jornada de ayer, por la mañana durante más de cuatro horas y la por la tarde-noche durante casi tres horas más, pero el acuerdo no fue posible, según el IB-Salut por la «falta de voluntad negociadora» de la organización sindical y según el Sindicato Médico por la falta de talante negociar de la Administración.
A las diez de la noche se dieron por cerrados los intentos de negociación por ambas partes, cuando el Sindicato Médico -a través de una llamada telefónica- rechazó la última oferta efectuada por el IB-Salut.
Con semblante serio, lejos de la alegría que demostraba al inicio de la reunión de la mañana cuando todavía pensaban que se podría alcanzar un acuerdo, Josep Pomar, director general del IB-Salut, lamentó «profundamente» que el Sindicato Médico «mantenga la huelga convocada en los centros de salud y hospitales de la sanidad pública» a pesar de «las propuestas concretas y mejoras planteadas».
Mejoras que Pomar cifró en 8 millones de euros, uno más que en la reunión del pasado jueves, e hizo una llamada a «la responsabilidad de los profesionales médicos» a los que pidió que «valoren en su totalidad las propuestas planteadas» y que reconsideren el secundar la huelga.
Para la Conselleria de Salut, dijo Pomar, «es muy importante que los ciudadanos no sufran, en la medida de lo posible, las consecuencias de una huelga que no tiene ningún sentido», concretó el director general del IB-Salut.
Por su parte Miguel Lázaro, presidente hospitalario del Sindicato Médico e Isidro Torres, secretario general de la organización sindical también lamentaron que no se hubiera podido alcanzar un acuerdo que permitiera desconvocar la huelga y apuntaron que «hoy es un día triste».