No son unos libros cualquiera. En los diversos puestos que acoge la feria del libro viejo y de ocasión, en La Misericòrdia, estos días, se pueden encontrar auténticas maravillas. Libros para todos los gustos, partes del mundo y con un valor, en ocasiones mucho más sentimental que el económico. Con un euro como mínimo y miles de máximo se pueden adquirir desde antiguos cuentos infantiles, postales, cromos, carteles, estampas, periódicos e incluso juegos de entretenimiento de antaño. Son libreros llegados desde Madrid, León, Valencia, Ponferrada, Granada y una de Palma, concretamente Librería Fiol, donde Maria Amengual nos muestra un ejemplar de la La Divina Comedia, con grabados de Gustavo Doré de 1884 y que se venden dos tomos, por 6.000 euros. Entre las curiosidades, encontramos un libro, escrito en italiano, donde se hace referencia a discursos que se hacían en el sector del comercio por los años 1740. Durante el rato que estuvimos con MarIa Amengual, muchas abuelitas se interesaban por cuentos infantiles para regalar a sus nietos. Y es que se pueden encontrar cuentos de Caperucita, La Cenicienta y otros a partir de un euro. En el stand de Luis Lázaro, de Madrid, encontramos un catálogo, único, pues se lo compró él mismo a Alberto García Alix, de 1978-1983, precisamente no es nada caro, su precio es de cinco euros. Luis también pone a la venta una curiosa serie de doce libritos de «Contes d'ahir i d'Avui», que en su día costaba 40 céntimos cada uno y ahora se vende todos por 200 euros. Luis nos comenta que «es una feria donde viene el que busca un libro especial y gente que pasa y no se había enterado de que se celebraba esta feria y siempre compra algo». Alrededor de unas 12 toneladas de «papel viejo» es lo que acoge esta feria de libros de ocasión donde por ejemplo podemos adquirir por unos miles de euros El Quijote más preciado por cualquier Cervantista. Se trata de la edición más emblemática pues fue la primera en España y mandada hacer por la Academia Española. Es un precioso ejemplar que nos muestra Felipe Martínez, de la Librería Camino de Santiago, y que además nos enseña revistas francesas para niñas de 1910 llamadas Fillette. Por otro lado, Eduardo Mengual, de librería Al Tossal de Valencia, dice haberse quedado con un sólo ejemplar de El Heraldo de Sóller de 1914. Un periódico que sólo se recibía por suscripción trimestral al precio de una peseta y que se han vendido diez de los once que trajo, a 15 euros cada uno.
Julián Aguirre
(texto y foto)