UM y PP manifestaron ayer sus discrepancias por el decreto de admisión de alumnos que presentó el pasado martes la consellera d'Educació, Bàrbara Galmés, y cuya aprobación está prevista este viernes en Consell de Govern.
Sin embargo, todo apunta a que para ello tendrá que sufrir algunas modificaciones, ya que UM ha instado a a la Conselleria d'Educació a modificar la propuesta que obliga a los centros educativos sostenidos con fondos públicos a reservar tres plazas para los alumnos con necesidades específicas de soporte educativos hasta el mes de septiembre. El partido que preside Miquel Nadal considera que una vez que se ha de proceder a la matriculación no tiene sentido alargar el proceso, que actualmente acaba en junio, por lo que propone que se mantenga esta fecha.
UM manifestó ayer en un comunicado que el decreto propuesto por Galmés supone «un perjuicio para los mallorquines». Argumentan que «el ciudadano que opte por esperar corre el riego de quedarse sin plaza para su hijo y sin posibilidad de optar a otra».
Esta opinión es compartida por el PP. Así, el ex conseller d'Educació, Francesc Fiol, compareció en rueda de prensa, junto al que fuera director general de Planificació i Centres en el anterior Govern, Rafael Bosch, y aseguró que se debe garantizar la elección de centros de los padres. En este sentido explicó que la concentración de inmigrantes en algunos centros escolares se debe a que los padres piden los centros que tienen más cerca de su casa, y los inmigrantes suelen vivir por las mismas zonas. «¿Vamos a decirle a un padre que lleve a su hijo a un colegio más lejano? Eso es intervencionismo. Yo me opongo», sentenció Fiol.
Por otra parte, el diputado popular también quiso dejar claro que la reserva de tres plazas por aula para alumnos con necesidades educativas ya la aprobó el PP la pasada legislatura y criticó la novedad de que se guarden hasta septiembre.
Desde Educación especifican que otra de las novedades es que antes se reservaban tres plazas para los alumnos con necesidades especiales y el decreto de Galmés contempla que se reserven dos para estos alumnos y una para los de necesidades específicas, como es el caso de los inmigrantes.
Por su parte, el portavoz del Bloc, Biel Barceló, valoró positivamente que se intente reducir la concentración de alumnos recién llegados en determinados centros.
No obstante, manifestó que «en el Consell de Govern se tendrán que pulir o modificar algunos aspectos» que no se han modificado respecto al decreto de Admisión del año anterior con los que el Bloc fue muy crítico.