A partir del próximo curso escolar Balears contará con 62 policías tutores que intervendrán dentro o en el entorno de los institutos de Educación Secundaria, para prevenir o resolver conflictos en los que se vean implicados menores.
La implantación progresiva de esta figura es el objetivo del acuerdo de colaboración que firmaron ayer las conselleras de Educació, Bàrbara Galmés, y de Interior, María Àngeles Leciñena, quienes explicaron que ya se han formado 32 policías tutores (algunos de ellos ya ejercen) y que durante el próximo mes de noviembre se realizará otro curso para adiestrar a 30 agentes más.
La presencia de esta nueva figura en centros educativos debe ser solicitada por los ayuntamientos, una vez que los consejos escolares -donde hay un representante municipal- determinen si es conveniente la vigilancia policial diaria.
El policía tutor tiene dedicación exclusiva a lo largo del curso y su misión es vigilar el exterior de los centros, dar apoyo a los menores, profesores y padres en la prevención de situaciones de riesgo, regular el tráfico en la hora de entrada y salida de alumnos, controlar el absentismo escolar y conocer en profundidad el centro, así como su entorno.
También se encarga de intervenir en grupos de menores con antecedentes de conductas conflictivas, actuar en situaciones de riesgo, dar un apoyo específico a los menores víctimas de estas situaciones, controlar la seguridad vial y mantener reuniones periódicas con la dirección del centro, el profesorado y la red social.
«Es un mediador en conflictos, integrado en el equipo docente del centro, con una labor mediadora, pedagógica, preventiva y disuasoria de conductas de peligro en las que los alumnos puedan ser sujetos activos o pasivos, como la violencia escolar, el consumo de alcohol o drogas, los abusos contra la libertad sexual o el absentismo escolar», indicó Leciñena. Galmés reconoció, por su parte, que «con este protocolo de actuación lo que se hace es regularizar una situación que, de hecho, ya se daba en muchos casos con los policías de barrio, pero con la diferencia de que ahora el agente tutor cuenta con una formación específica para este trabajo». El objetivo final sería extender la red a cada centro de las Islas.