Desde hace días, muchas son las personas que han comentado las consecuencias de la implicación de Javier Rodrigo de Santos en un supuesto caso de malversación de fondos públicos. El ex teniente de alcalde de Urbanisme del Ajuntament de Palma ha sido acusado de gastar más de 50.000 euros a cuenta de las arcas municipales en una serie de clubes de alterne de ambiente gay. El caso está en manos de la Fiscalía.
Este periódico ha querido sondear la opinión de la sociedad mallorquina para conocer sus puntos de vista. A todos se les ha planteado el mismo cuestionario, cinco preguntas para determinar sus posturas.
Las cuestiones fueron: ¿Qué opinión le merece el «caso De Santos»?, ¿fallaron los mecanismos de control de Cort?, ¿cree que puede haber más responsables y tendrían que darse más dimisiones?, ¿ha hecho el Partido Popular lo que debía? y ¿se debe exigir a un cargo público una conducta en su vida privada que no comprometa a la institución? La mayoría de los encuestados coincidió en denunciar la actitud del ex edil, sobre todo la mala utilización del dinero público que hizo. Las respuestas más divergentes se dieron en la última pregunta, la que habla sobre la vida privada de un cargo público.
Políticos, sindicalistas, representantes de los vecinos y de los colegios profesionales explican en estas páginas su opinión. Sólo el PP quiso mantenerse al margen de la iniciativa, alegando que ya han dicho todo lo que tenían que decir a la espera de lo que diga Fiscalía.