Durante estos días, las panades, los cocarrois, los rubiols y los crespells deben estar presentes en todas las mesas sin excepción. Por este motivo, el Secretariat Diocesà de Pastoral Penintenciària organizó ayer, un año más, la campaña de recogida de crespells que, en nombre de los cristianos de la Isla, se harán llegar a los reclusos de la prisión de Palma.
La recogida tuvo lugar en la parroquia de Corpus Christi de Son Gotleu de 9.00 a 12.00 horas. Según fuentes del Secretariat, esta aportación debía ir acompañada por una «plegaria por los privados de libertad y de una reflexión serena, comprensiva y compasiva sobre la realidad de estas personas reclusas». Así, el Obispado desea que esta donación sea un «signo de la voluntad de acercamiento a su realidad y una mayor implicación para una sociedad más justa y libre».