Un auto del juzgado de lo Contencioso Administrativo número 1 de Palma ha decretado el cierre del Centro Canino Internacional como residencia, por lo que sólo podrá permanecer abierto legalmente como criadero. Esto significa que de los animales que hoy acoge el Centro sólo podrán quedarse los cachorros, un macho y unas diez hembras. Además del burro y el gato que aún quedan.
El resto de animales serán trasladados a «Son Reus o alguna residencia, pero en principio ya no serán sacrificados» cuenta Nuria, coordinadora de voluntarios. Por eso es necesario que todos ellos encuentren un hogar adoptivo.
El futuro
Según el auto judicial, el plazo para el cierre del Centro es de unos 15 días. Luego la mayoría de los perros pasarán a alguna residencia, que nunca podrá ser como la que tienen ahora mismo: un lugar donde cada día acude gente amante de los animales y que les pasea y trata con cariño sin esperar nada a cambio.
Puede que muchos de los perros que vemos en estas páginas ni tan sólo vuelvan a correr al sol o a mover su cola cada vez que alguien se acerque a ellos. Al igual que los que ahora regentan el Centro, que ya no podrán acoger a todos los animales que encuentran o les traen de la calle.