Las desaladoras de Andratx y Alcúdia costarán 15.372.000 euros más de lo previsto inicialmente. De este modo, el coste de construcción y explotación de la desaladora de Andratx pasará de ser de 14.428.092 euros a 23.648.092 euros. En el caso de la desaladora de Alcúdia se pasará de los 61.913.040 euros previstos en un principio a 69.599.049 euros.
En estos incrementos han influido principalmente tres factores. En primer lugar, el suministro de la energía previsto inicialmente era insuficiente y ha sido necesario aumentarlo. En segundo lugar, la salmuera (sustancia resultante de la desalación) presentaba unos índices excesivamente elevados de concentración de sal y podía crear problemas ambientales al tirarla al mar a través de los emisarios. Por ello, ha sido necesario incorporar procesos para dispersar y diluir la salmuera con más agua de mar. En tercer lugar, los pozos de captación de agua de mar eran insuficientes y ha sido necesario realizar más perforaciones de las previstas.
Más desaladoras
Además de en Andratx y Alcúdia también se están construyendo desaladoras en Ciutadella y Santa Eulària. Hasta el momento no se han producido cambios en el presupuesto previsto en un primer momento. No obstante, con toda probabilidad también será necesario realizar algunas modificaciones que supondrán más costes. De momento, el presupuesto de construcción y explotación de la desaladora de Ciutadella es de 41.817.880 euros y el de la de Santa Eulària de 42.990.600 euros.
Estas cuatro desaladoras, que fueron aprobadas cuando Jaume Matas era ministro de Medio Ambiente, tienen una capacidad total de desalar 53.000 metros cúbicos de agua diarios. En concreto, la capacidad de la desaladora de Andratx será de 14.000 metros cúbicos al día, la de Alcúdia será también de 14.000 metros cúbicos, la de Ciutadella de 10.000 metros cúbicos y la de Santa Eulària de 15.000 metros cúbicos de agua diarios.
Año 2009 El director general de Recursos Hídrics, Isidre Canyelles, señala que la previsión es que estas cuatro desaladoras estén funcionando a mediados del año 2009 y asegura que «la desalación es fundamental para Balears».
Las desaladoras de Ciutadella, Santa Eulària, Andratx y Alcúdia supondrán una inversión de 178.055.612 euros, si no son necesarios más incrementos. Esta cantidad la asumirán las empresas adjudicatarias, salvo 37 millones de euros que destinarán los fondos de cohesión de la Unión Europea. No obstante, el acuerdo inicial (alcanzado cuando Jaume Matas era Ministro de Medio Ambiente) contemplaba que el Gobierno central aportaba el 85 por ciento de la inversión y el 15 por ciento restante repercutiría sobre la tarifa del agua, recaudado por las empresas adjudicatarias.
Balears ya tiene experiencia en desalación de agua, puesto que en la actualidad cuenta con seis desaladoras en funcionamiento, con una capacidad total de 103.300 metros cúbicos de agua desalada diarios.
En concreto, la capacidad de la desaladora de la bahía de Palma es de 64.800 metros cúbicos diarios, la de Son Ferrer (Calvià) es de 5.500 metros cúbicos, la de Eivissa (Vila) de 9.000 metros cúbicos, la de Sant Antoni de Portmany de 17.500 metros cúbicos, la de Formentera de 4.000 metros cúbicos y la de Camp de Mar (Andratx) de 2.500 metros cúbicos diarios. No obstante, esta última se cerrará cuando entre en funcionamiento la nueva desaladora de Andratx.
La capacidad a la que operan estas desaladoras depende de la demanda de agua que tengan. Por lo general, en los periodos más secos suelen desalar más agua que en los más lluviosos. Por citar un ejemplo, durante el pasado mes de enero la desaladora de la bahía de Palma operó al 45 por ciento de su capacidad. Esta instalación suministra agua a Palma, Calvià, Marratxí y Andratx.
Sin embargo, la desaladora de Son Ferrer, que suministra agua a Calvià, trabajó al cien por cien de su capacidad durante el primer mes del año.