Así lo afirmó ayer el director de la Fundación Internacional O'Belén, Emilio Pinto, quien presentó la celebración del IV Congreso Multidisciplinar de Trastornos del Comportamiento en Menores, que tendrá lugar el 7 y 8 de marzo en Palma.
El director de la Fundación O'Belén, entidad asistencial que promueve la atención a la infancia, reconoció que «los expertos no saben aún por qué en las Islas hay una mayor propensión a estos problemas».
No obstante, aclaró que «esa es una de las razones por las que el congreso se realizará en Balears, una zona considerada un punto rojo» por diversas razones, entre las que destacó el que muchos jóvenes isleños abandonan tempranamente sus estudios porque tienen la posibilidad de «hacer dinero fácil en el mundo del turismo», aunque «tampoco consiguen un empleo que les aporte estabilidad».
Pinto fue tajante al declarar que «vivimos la mayor depresión de la infancia en la historia de España», y en defensa de esta afirmación recordó que un 30-35% de los menores abandonan sus estudios, que cada año crecen un 30% las denuncias de padres a hijos y que un 40% de jóvenes entre 16 y 20 años ni trabaja ni estudia. Estos datos, reconoció, indican que «los métodos que se aplican no están funcionando» y apeló a la responsabilidad de toda la sociedad, «porque hoy los jóvenes nos dan miedo».
La Fundación O´Belén dispone de centros terapéuticos en la Península, para la atención de menores con problemas graves de comportamiento, que actualmente acogen a 1.300 menores, «y tenemos una lista de espera de casi 2.000». Preguntado por la edad a la que estos trastornos se presentan, Pinto informó de que «un 20% de los niños del mundo ya nacen con algún problema», si bien, a modo de ejemplo, mencionó el caso del niño más pequeño internado, «tiene 7 años y está en el centro tras intentar asesinar a su madre».