Abigail y Talia lo tienen claro: para elaborar una ensaimada hace falta, por lo menos, harina y azúcar. «Nos gustan mucho. También sabemos hacer pan», afirman. Son dos de los alumnos de sexto de Primaria de la Escuela Graduada, que ayer visitaron el Forn de la Pelleteria (Can Miquel) para ponerse el delantal y aprender a elaborar este dulce típico mallorquín. La iniciativa fue organizada por la Conselleria d'Agricultura i Pesca dentro de la campaña 'Los alimentos de les Illes Balears en la escuela'. Este año, y como novedad, se han incorporado jornadas de puertas abiertas en diversos hornos artesanos.
Miquel Pujol, panadero y miembro del Consell Regulador de l'Ensaïmada de Mallorca, explicó a los estudiantes cómo funciona un obrador y, todos en este espacio, aprendieron a elaborar ensaimadas pequeñas con una pasta hecha con agua, harina y huevo (extendida sobre un poco de aceite en la base), a la que se le añadió manteca y azúcar. Ani y Manuel fueron los dos alumnos que finalmente se pusieron el delantal y aprendieron 'in situ' los secretos de la elaboración de la ensaimada. «Lo que más nos ha gustado ha sido estirar la pasta y extender la manteca», afirman.
«Esta actividad tiene por objetivo que los jóvenes conozcan los productos con denominación de calidad, además de fomentar buenos hábitos en la alimentación», afirmó la consellera Mercè Amer.
Mercedes Azagra
Fotos: Sebastià Amengual