Los administradores concursales de los hoteles Santa Ana, La Cala y Playa Cala Mayor recibieron dos ofertas por esos inmuebles tras fijar en 715.000 euros el precio mínimo de liquidación. Esa cantidad «puede aumentar», según las fuentes consultadas por este diario.
Las entidades mercantiles 'Beach Hoteles S.A.', Gesbal, S.A.' y 'Ananapurna Investements S.A.' iniciaron un concurso voluntario de acreedores (la antigua suspensión de pagos) en septiembre de 2006 para hacer frente a una deuda de cuatro millones de euros. El principal acreedor era la Seguridad Social.
Los tres hoteles abrieron sus puertas la pasada temporada alta, siempre bajo la fiscalización de los administradores concursales, y ahora se preparan para su liquidación definitiva. Los nuevos propietarios, no obstante, deben garantizar el pago de los 715.000 euros como mínimo y su oferta será analizada a fondo por los administradores concursales.
En principio, tienen prohibido ceder o transferir total o parcialmente a un tercero los derechos y obligaciones que emanan del nuevo contrato. Asimismo, las obras de mejora, conservación y de adaptación a la categoría de los establecimientos están a cargo de los nuevos propietarios.
Según los administradores concursales, designados por el Juzgado de lo Mercantil de Palma, el estado de conservación de los hoteles, especialmente el Santa Ana, es deficiente dado que precisan de reformas en cuanto a las conducciones y tuberías, así como nuevo acondicionamiento de los baños.
Por otra parte, los sindicatos UGT y CC OO habían denunciado una operación especulativa con esos tres hoteles de Cala Major, ya que entendían que los principales accionistas querían reconvertirlos en apartamentos.