M. JUNCOSA
Los pisos nuevos más caros que comercializan los agentes de la propiedad inmobiliaria en estos momentos en la ciudad de Palma se encuentran en Génova, con precios de 4.510 euros el metro cuadrado, mientras que los reformados están ubicados en el Casc Antic, con valores de 3.830 euros, según indica la Estadística de Precios de la Viviendas por Zonas elaborada por el Colegio de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria de Balears (API).
Dicho informe, realizado en base a precios solicitados el pasado mes de julio a los 270 intermediarios inmobiliarios que operan en Balears, divide los valores inmobiliarios por zonas y tipología de los inmuebles.
De acuerdo con estos datos, los precios de los chalets adosados nuevos oscilan entre los 1.628 euros el metro cuadrado del Pla de Na tesa, en este caso en el municipio de Marratxí, y los 2.240 euros de Son Ferriol; mientras que los adosados de segunda mano varían entre los 1.368 euros de Son Rapinya y los 3.379 euros de Son Xigala.
En cuanto a los pisos en bloques plurifamiliares usados, los precios más elevados se encuentran en el Passeig Marítim (3,.381 euros el metros cuadrado) y los más baratos en las barriadas de Son Gotleu (1.465 euros) y del Rafal Nou (1.466 euros).
En cuanto a los datos oficiales, el precio de la vivienda libre en Balears se situó en 2.372 euros por metro cuadrado en el tercer trimestre de este año, es decir, 311 euros más que la media nacional, situada en 2.061 euros, de acuerdo con los datos difundidos esta semana por el Ministerio de la Vivienda.
De acuerdo con la estadística del Gobierno, en las Illes Balears la subida fue del 6'8 por ciento respecto al tercer trimestre de 2006 al situarse el precio del metro cuadrado en 2.372 euros, mientras que en relación al segundo trimestre de este año se ha producido un aumento del 0'3 por ciento.
En cuanto a las perspectivas de futuro, tanto promotores como vendedores vaticinan que se mantendrá la desaceleración en crecimiento de los precios inmobiliarios en Balears como consecuencia del encarecimiento de la financiación derivada de las sucesivas subidas de los tipos de interés que ha acometido el Banco Central Europeo.
De hecho, la estadística de hipotecas que elabora el Instituto Nacional de Estadística muestra un estancamiento en el número de operaciones formalizadas en el primer semestre del año en Balears, aunque el importe sigue aumentando por el encarecimiento de los pisos.