La sensación de bochorno regresó ayer a Mallorca, dejando la impresión de que el verano de 2007, al que apenas le queda una semana, se resiste a finalizar.
La jornada de ayer no se caracterizó por unas temperaturas excesivamente altas. De hecho, sólo dos valores máximos de las estaciones meteorológicas automáticas del Centre Territorial llegaron o superaron los 30 grados: sa Pobla, con 31'6 grados, y Porreres, con 30 justos.
Sin embargo, los niveles de humedad relativa superaron en todos los casos el 90 por ciento, con excepción de Portopí, que se quedó a las puertas, con un 86 por ciento.
Estos niveles de humedad dan la sensación de que la temperatura es dos o tres grados superior. No obstante, fuentes del Centre Meteorològic Territorial señalaron que «esta humedad es muy alta, pero no es nada extraordinaria en Balears, de igual modo que el viento aumenta la sensación de frío».
Para este fin de semana, el Centre Meteorològic Territorial de Balears prevé probabilidades de chubascos moderados para hoy sábado, pero el tiempo irá mejorando a medida que transcurra el día. Para mañana domingo, el cielo puede aparecer nuboso, pero sin riesgo de precipitaciones.