Prácticamente al completo, a falta de los duques de Palma de Mallorca y sus hijas y la pequeña Sofía, la Familia Real española asistió a lo largo de la jornada de ayer al muelle de las golondrinas, frente al Auditòrium de Palma, en pleno Passeig Marítim; lugar que se ha convertido en el nuevo destino de la emblemática competición y que mueve más medios de comunicación entre las instalaciones que en el propio campo de regatas.
Como se ha dado durante toda la semana, el primero en hacer su aparición, por la mañana, fue el príncipe Felipe que, tras conversar con sus compañeros del CAM, se puso como uno más a realizar los preparativos. Minutos después lo hacían los Reyes, don Juan Carlos y doña Sofía, acompañados por la infanta Elena quien además se sumó al equipo de regatas del equipo Siemens. Ya por la tarde la sorpresa fue cuando acudieron a recibir a los regatistas los pequeños. Nos referimos a la infanta Leonor acompañada con por su madre, la princesa Letizia y la Reina. Pero, además, aparecieron por el muelle el duque de Lugo, Jaime de Marichalar, y los pequeños, Froilán y Victoria Federica.
Sin parpadear, los más curiosos cogieron cámaras y comenzaro a fotografiar a los Reyes, los Principes y los Duques.