Al igual que en veranos anteriores, las fiestas privadas son las que terminan animando las noches, este año más bien discretas salvo en las zonas de costa y en los fines de semana.
Si el viernes estuvimos en el cumple de Tin Barceló, del que damos referencia al lado, anteanoche asistimos a la fiesta de verano que organizó en su casa de Costa den Blanes Patricia de la Riva, donde reunió alrededor de 40 invitados, entre ingleses, rusos españoles y suecos, y entre los que vimos a Birguitta de Suecia. A la vez, la fiesta sirvió para que nos reencontráramos con viejos amigos, como Pepe Escaño y su guapa mujer, Anette, a quienes no veíamos desde hacía bastante tiempo
Tras el aperitivo, se sirvió la cena. O mejor, los invitados se sirvieron de un variado, abundante y rico bufé, regado con buen vino y champán, coronado por un postre a base de tabla de quesos, tiramisú, tartas, ensaladas de frutas y frutas, y amenizado por el cantante "y showman" Luis González, especializado en música latina (él y su guitarra se bastaron para hacer bailar a todos; incluso de hacerlos bailar, cogidos por la cintura, alrededor de la piscina), y la británica Gee Carmichael, cuya voz dejó maravillados a los invitados.
Antes del baile, a la anfitriona se le ocurrió la idea de que un representante de cada mesa contara un chiste, que ella se encargaría de traducir. De nuestra mesa lo contó Rafi Córdoba, que como se ve que gustó, la invitaron a que contara un segundo. Claro está, no es lo mismo contar un chiste y que todos lo entiendan todo, a que para que lo entiendas te lo tengan que traducir. De ahí que a alguno no le viéramos la gracia por ningún lado, lo que no quitó que nos riéramos viendo reir a los demás. Sobre las dos de a madrugada abandonaba la fiesta que seguía muy animada.