La Platja de Palma nos encontramos un año más a numerosos jóvenes alemanes dispuestos a disfrutar del sol, la playa y la cerveza, desde la mañana a la noche.
Aquí el ambiente resulta algo más animado que en años anteriores, ya que en algunas terrazas el silencio sepulcral que dominaba el panorama ha dado paso a una ambientación musical más acorde con la zona, siempre y cuando se mantenga a un volumen moderado y hasta medianoche.
En un típico bier garten encontramos a Jeng y Philipp, quienes nos comentan que les gusta mucho la zona. «Llevamos cinco días aquí. Es la primera vez que venimos a Mallorca y alternamos la playa, que está limpia y con un mar de atractivo color, con la cervecería. La verdad es que hay un buen ambiente, es como estar en Baviera en plena fiesta de la cerveza, pero es una lástima que la música acabe tan temprano. Pasadas las doce, la gente se queda un poco colgada y sin saber que hacer».
Unos metros más adelante, llegamos al famoso balneario 6, que congrega la mayor animación a todas horas, en torno a grupos de jóvenes que forman corrillos en la arena y también se sientan sobre el pretil del murete que separa el bar de la arena, siguiendo el ritmo de la música. La zona comprendida entre la calle del jamón y la calle de la cerveza, constituye el epicentro del ambiente . En todo caso a las terrazas se añade el aliciente de las nuevas instalaciones que en forma de abadía en ruinas o de palacio colonial especializado en asados, atraen la mirada del turista.