El president del Govern, Francesc Antich, pidió ayer a sus nuevos conselleras y consellers que trabajen a «pie de obra» para sentir directamente el pulso de la ciudadanía. Antich reclamó a los integrantes de su nuevo Ejecutivo que si es necesario que «pisen el barro». En un acto celebrado en Sa Llotja, los nuevos consellers fueron prometiendo sus cargos. Sólo Biel Vicens, nuevo conseller de Movilitat, prometió el cargo «sin renunciar al derecho a la autodeterminación» del pueblo balear. Todos los demás prometieron sus cargos con la fórmula habitual. Tras la protocolaria promesa de los nuevos integrantes del Ejecutivo, Antich destacó que todos ellos tendrán el «honor y el privilegio de dirigir este nuevo episodio de la historia del autogobierno en Balears». «Deseo para todos acierto y buena suerte», subrayó.
Antich dijo que el espíritu de servicio «al país y a la ciudadanía desde la responsabilidad de una conselleria no siempre es fácil de conciliar con la vida de familia, aunque es imprescindible». En su segundo discurso como president del Govern -el primero lo pronunció el viernes cuando prometió su cargo- Antich solicitó a sus compañeros de Govern «comprensión y apoyo en los momentos difíciles, desde la perspectiva que también compartireis los éxitos de la labor de gobierno». «Señoras y señores consellers, iniciamos una trayectoria apasionante para la mejora de la calidad de vida de nuestros conciudadanos para la forja de sus ilusiones de futuro. Iniciamos un proyecto de mirada larga», destacó Antich en el breve discurso pronunciado en Sa Llotja.
Antich recordó a todos sus consellers que no deben perder nunca «la dimensión pública de la responsabilidad y, mucho menos todavía, la dimensión humana de cada una de las decisiones que tengais que adoptar. Somos servidores de las personas y a ellas nos debemos». «El autogobierno no triunfa sólo en los despachos. Se tiene que hacer en la calle, en los hogares de las familias de este país, en los colegios, en los puestos de trabajo, en los puntos de ocio. Por esto os animo a trabajar a pie de obra, sintiendo directamente el pulso de la ciudadanía y, si es necesario, pisando el barro». Durante su discurso, Antich reiteró que su gran objetivo es gobernar para las personas. «Prometí que primero, las personas. Y así será», sentenció.