NEKANE DOMBLÀS
«Aquí no hay conselleries; lo que hay es un Govern unitario que estará presidido por Francesc Antich». Con esta declaración de principio, Albert Moragues, conseller de Presidència del Govern, intentará coordinar la labor de todas las conselleries del Ejecutivo. Hombre fuerte del Govern de Francesc Antich, Moragues asegura que su objetivo primordial es que todos los departamentos se centren en los ejes políticos diseñados por el president del Ejecutivo: familia, vivienda, movilidad y educación.
De él dependerá además la política de comunicación del nuevo Govern -la Direcció General de Comunicació-, aunque todavía no está decidido si será o no el portavoz del Ejecutivo.
Aseguró que su propósito en el gabinete de Antich será conseguir una dirección política fuerte, por lo que la labor de coordinación será esencial. Moragues confió ayer en no tener demasiados problemas con el resto de formaciones políticas que se han sumado al Govern. «Tenemos la voluntad colectiva de ser un gobierno compacto y de actuar con iniciativas políticas a favor de los ciudadanos aplicadas de forma unitaria», añadió la mano derecha de Antich.
Moragues reconoció que esta nueva responsabilidad política supone un reto muy importante y precisó, en cualquier caso, que lo primero que debe hacer es «aterrizar» en su despacho, que estará ubicado en el edificio que ahora ocupa la Vicepresidència.