Francesc Antich ya tiene el voto de los 30 diputados necesarios para convertirle en el próximo president del Govern. Lo confirmó la presidenta del Parlament, Maria Antònia Munar, que ayer finalizó la ronda de audiencias con los representantes de los partidos políticos.
Fue el turno de Gabriel Barceló, líder del Bloc, quien anunció a Munar que votarán a Antich como presidente. También acudió el futuro jefe del Govern, Francesc Antich, que mantuvo una reunión con la presidenta de la Cámara. El único partido que no votará a Antich fue el PP. Dos representantes de la formación política, Rosa Estaràs y Joan Flaquer informaron ayer a Munar que proponían a la propia Estaràs como presidenta. La dirigente popular sólo cuenta con los votos de los 29 diputados del PP y de la Agrupación Independiente Popular de Formentera (AIPF).
Al término de este encuentro, que según la diputada del PP se hizo «por imperativo legal», Estaràs lamentó la escasa disposición al diálogo con el PP demostrada por la presidenta del Parlament, a pesar de las llamadas al consenso realizadas en el discurso que pronunció tras su elección. «Me reuní con la persona que creo que representaba al PP; si me equivoqué, pido disculpas, pero me reuní con el señor Matas», contestó irónicamente la presidenta de la Cámara.
Sesión tensa
En declaraciones realizadas a los periodistas al término de la ronda de audiencias, la presidenta del Parlament confió en que la sesión de investidura del nuevo president no sea tensa e informó además que propondrá a Antich ya que es el único que tiene los votos suficientes para ser elegido president.
Por lo que respecta a las declaraciones realizadas por los representantes de los partidos, Gabriel Barceló, líder del Bloc, anunció que su grupo parlamentario estará inicialmente compuesto por cinco diputados, los cuatro del Bloc más el PSM de Menorca, pero reconoció que cabe la posibilidad de que las dos diputadas de Eivissa pel Canvi también se incorporen al grupo en lugar de pasar al Grup Mixt, donde se integrará Unió Mallorquina.
Barceló se refirió además a la petición realizada por el diputado de AIPF, Josep Mayans, de formar grupo propio con el solo escaño y consideró que una cesión de tres diputados que luego volverían al PP sería muy extraña». También se refirió a la posibilidad de que Mayans se integre en el Grup Mixt, lo que podría dejar al Govern de centro izquierda en minoría en las comisiones parlamentarias en las que actúe como portavoz. Barceló restó importancia a este hecho.
«Deseo que sea un legislatura tranquila y sin crispación», mantuvo Barceló, quien aseguró que durante la reunión también trató por encima con la presidenta del Parlament la situación de sectores económicos como la educación, el turismo, la sanidad y la agricultura. El candidato a la Presidència del Govern, Francesc Antich, consideró que en la nueva legislatura se debe seguir la línea marcada por la presidenta del Parlament en su discurso de toma de posesión, es decir, la legislatura debe estar basada en el diálogo y el consenso.
Desde esta perspectiva, Antich tendió la mano al PP para que participe de esta filosofía y anunció que intentará llegar a acuerdos con todos los partidos de la Cámara balear, incluido el popular, cuando deban adoptarse decisiones trascendentales para la Comunitat. El futuro president se refirió además a las dificultades que está teniendo para formar gobierno por culpa de la paridad.