La alcaldesa de Palma, la socialista Aina Calvo, vivió ayer su primera jornada de trabajo en el Ajuntament, tras su elección el pasado sábado. Calvo y la ex alcaldesa y líder de la oposición, la popular Catalina Cirer, entraron juntas en el despacho oficial que ocupó Cirer durante los últimos cuatro años, en donde estuvieron reunidas durante unos treinta minutos para tratar sobre cuestiones prácticas relacionadas con el traspaso de poder.
Tras la reunión, Calvo señaló que el encuentro, que transcurrió con «mucha cordialidad», había sido un ejemplo de «total normalidad democrática», en el que hubo un intercambio de impresiones. Asimismo, agradeció a Cirer su «extraordinaria buena disposición» para facilitar «un aterrizaje lo más cómodo posible» a Cort del nuevo equipo de gobierno, que, en principio, podría ser designado de forma oficial esta semana. Sobre la ex alcaldesa señaló también que «ha jugado un papel fundamental» en Palma en el anterior mandato, y añadió que «es depositaria de una experiencia que debe ponerse en valor».
La nueva alcaldesa afirmó que Ciutat «está viviendo un momento histórico», tras 16 años de mayoría absoluta del PP en Cort, con «un gobierno municipal de progreso», formado por el PSOE, el Bloc y UM.
Calvo también señaló que el día de ayer estaba siendo vivido por ella con una sensación de «expectación, emoción y responsabilidad». Igualmente, anunció que durante estos días se reunirá con funcionarios y altos cargos del Ajuntament para una primera toma de contacto.
Por otro lado, el regidor socialista Andreu Alcover, que forma parte del equipo de gobierno de Calvo, tiene previsto abandonar en los próximos días su cargo de gerente en la UIB.