«Espero tener eseny, la fuerza, la prudencia, la humildad y la serenidad para poder demostrar, a la ciudad de Palma, que tiene un gobierno político que cree en el respeto a la palabra dada». Con estas palabras, acabó su intervención, tras tomar previamente posesión de su cargo, la nueva alcaldesa de Palma, la socialista Aina Calvo.
Con anterioridad, habían tomado posesión de su cargo los 29 ediles que forman parte del nuevo Consistorio palmesano, y se había producido la votación que dio la Alcaldía a Calvo, ya que a los votos de los 11 ediles del PSOE se sumaron los 2 del Bloc y los otros dos de UM, 15 en total, mientras que la candidata popular, Catalina Cirer, obtuvo 14 votos, los de los ediles de su partido.
Fue la propia Cirer, alcaldesa de Ciutat durante el pasado mandato, quien entregó la vara de mando de Cort a Calvo.
La nueva alcaldesa inició su intervención dando la gracias. «Muchas gracias por la confianza que han depositado en mí. Muchas gracias a la ciudadanía de Palma por haber confiado, a través de su voto, en una opción de cambio en el gobierno de su ciudad. Por haber confiado y haber hecho posible la construcción de un programa de gobierno sólido, lleno de energía, pensado con ilusión y sentido de la responsabilidad para que transformemos esta ciudad, nuestra espléndida ciudad, Palma, y la hagamos mejor, para todos, para todas», afirmó. También agradeció de forma explícita el apoyo del Bloc y de UM a su investidura.
Tras recordar que el pasado viernes se cumplieron treinta años de las primeras elecciones democráticas y también que el pasado 27 de mayo «un conjunto importante y significativo de ciudadanos y ciudadanas de Palma» depositaron su confianza en el PP, señaló que los ciudadanos y ciudadanas de Palma encontrarán su puerta abierta y su respeto «más profundo». Además, indicó que huirá del «sectarismo» y que trabajará para que todas las personas que viven en Ciutat «se sientan a gusto y orgullosas de la ciudad que compartimos».
Más adelante, tuvo también palabras de agradecimiento para Catalina Cirer y para el anterior Consistorio. En este sentido, y mirando a Cirer, afirmó: «Soy consciente, a pesar de las diferencias de criterio, del esfuerzo personal que supone la labor de gobierno».
Igualmente, Calvo tuvo sentidas palabras de reconocimiento para el ex alcalde socialista de Palma, Ramón Aguiló, que presidió el Ajuntament entre 1979 y 1991. En ese instante hubo una gran ovación en el salón de plenos, en el que se encontraba presente el propio Aguiló, que recibió con gran emoción las palabras de la alcaldesa. «Quiero recuperar la ilusión y el compromiso que marcaron aquellos años de gobierno», destacó.