La ejecutiva del PP balear dió ayer plenos poderes a Jaume Matas para que consiga un pacto de gobernabilidad con Unió Mallorquina para el Govern, el Consell de Mallorca y el Ajuntament de Palma. Matas aseguró que la negociación con Munar se basará en el «programa, programa y programa», aunque reconoció que el PP deberá hacer cesiones, concesiones a la formación nacionalista.
Matas presidió la primera ejecutiva que se celebró después de las elecciones y donde se analizaron los resultados electorales. Matas interpreta que con el resultado electoral el PP tiene la responsabilidad de acceder a las principales instituciones de Balears. «Hay que intentar un pacto con Unió Mallorquina, que es nuestro aliado por razones ideológicas. Hay que garantizar la gobernabilidad porque este es el mandato que nos han dado los electores», señaló Matas después de la ejecutiva.
Matas afrontará personalmente la negociación con Munar con una propuesta programática. En este sentido, el presidente del PP balear recordó que el pacto de gobernabilidad suscrito la pasada legislatura había sido muy positivo para ambos partidos. El presidente del PP balear destacó que su propuesta de pacto con UM no se basará en un reparto de cargos institucionales. Este fue, precisamente, el mismo planteamiento que hizo UM tras la reunión de su ejecutiva. «No debe ser una negociación de cargos», dijo Matas.
El líder del PP cree que será mucho más fácil para UM pactar con los populares que hacerlo con seis formaciones políticas, en caso de que exista alguna posibilidad de reeditar el Pacte de Progrés. Matas insistió en que el PP había sido leal a UM durante la anterior legislatura cuando los nacionalistas dirigían el Consell y los populares el Govern. «Nosotros proponemos un pacto de gobernabilidad de cuatro años y creo que hay que dejar al margen las campañas electorales, que no deben sacarse de contexto. Los ciudadanos se han beneficiado de los pactos entre PP y UM», dijo.