Los consellers de Medi Ambient y Turisme, Jaume Font y Joan Flaquer respectivamente (ambos en funciones), presentaron ayer el Pla de Qualitat de les Aigües de Bany, que llega a su cuarto verano de aplicación tras ponerse en marcha en el de 2004.
En los tres años precedentes, el plan ha retirado un total de 671 toneladas de residuos de las aguas de Balears más cercanas a la costa, principalmente maderas, materia orgánica, plásticos, aceites, algas y otros (botellas de cristal, restos de fibra de embarcaciones, tablas de surf, motos de agua rotas, etc.).
Este verano, como en los anteriores, serán operativas 36 barcas recoge-residuos en los meses de junio y septiembre, y 40 durante julio y agosto. En este último caso, se distribuirán de la siguiente manera: 20 en Mallorca, 9 en Menorca, 8 en Eivissa y 3 en Formentera. En total, casi 90 personas están implicadas en el plan. La campaña, que cuesta 4 millones de euros, se desarrollará desde el 1 de junio hasta el 30 de septiembre y las barcas trabajan cada día desde las 6.30 hasta las 15.00 horas. En caso de emergencia puntual, incluido el rescate de embarcaciones que se han quedado sin gasolina o que se les ha averiado el motor, pueden trabajar por las tardes.
Jaume Font explicó que desde que se inició el plan, en 2004, «se ha producido una disminución progresiva de la proporción de plásticos recogidos y un aumento de las maderas, debido principalmente a las lluvias, que llenan de agua los cauces de los torrentes y éstos arrastran restos vegetales. Hemos retirado plásticos que llevaban muchos años en el mar y que, durante los inviernos, por la baja temperatura del agua, permanecían en el fondo».