Sóller y su Port volvieron a vivir ayer con intensidad y participación la celebración del simulacro del Firó, la conmemoración festiva de los hechos históricos del 11 de mayo de 1561. Un año más, y ya van 152, los mismos que han transcurrido desde que se instauró esta acontecimiento, las tropas del capitán Joan Angelats se volvieron a imponer sobre las huestes corsarias de Ochialí y se alzaron con la victoria pasadas las nueve de la noche; eso sí, después de sufrir muchas bajas entre «heridos» y «muertos». Más de mil personas, pertenecientes a los colectivos del Firó -colectivo Sant Ponç de payeses, Bandoleros, payesas y moros- participaron en las espectaculares batallas que, una vez más, fueron seguidas por miles de sollerics y visitantes, muchos de ellos desplazados hasta el valle para asistir al simulacro.
Eran poco más de las tres de la tarde cuando las campanas tocaban arrebato ya que se habían atisbado las primeras embarcaciones sarracenas acercándose a la costa de Tramuntana. Joan Angelats, capitán de la milicia sollerica, arengó a sus hombres y les exhortó a plantar cara a los invasores al grito del tradicional «¡A la lluita sollerics!». Poco después ya se libraba la primera batalla sobre la arena de Can Generós, alzándose con la victoria los sollerics que, ayudados por mercenarios bandoleros, lograron evitar el primer intento de desembarco a tiro de arcabuz y de honda.