EAida diva, nuevo buque insignia de Aida Cruises, llegó ayer al puerto de Palma en la primera visita durante su viaje inaugural, procedente de Alemania. Escala que marca el principio de su temporada con base en Palma, donde embarcará alrededor de 30.000 cruceristas alemanes hasta octubre, con destino al Mediterráneo Occidental en un crucero de frecuencia semanal. Acontecimiento que, como ya es tradicional, fue celebrado por la Autoritat Portuària con la entrega de la metopa conmemorativa en presencia de su presidente, Joan Verger, al capitan del buque, Przemyslaw Kurk, junto al vicepresidente de Aida Cruises, Michael Ungerer; los agentes consignatarios de Lantimar y Baleares Consignatarios.
Diseñado como un gigantesco club de vacaciones, esta unidad es la primera de una nueva serie que supone un aumento del cincuenta por ciento en su volumen, respecto a las que ahora componían la flota.
Entre las novedades más espectaculares, destaca a bordo un gran atrio acristalado en forma de anfiteatro, un solario con dos esculturas contemporáneas del artista mallorquín Amador Magraner y un spa con múltiples salas wellness. Al igual que las unidades precedentes de esta compañía, los pasajeros disponen a bordo de restaurantes de distinto ambiente gastronómico. EAida diva, con 68.000 toneladas y capacidad para 2.500 pasajeros, ha sido construido por Meyer Weft en Alemania.
Gabriel Alomar