Una veintena de bonsais, esos grandes árboles en miniatura, producto de largos años de cuidado y cultura botánica, se muestran en el claustro de Sant Antoniet de la calle Sant Miquel de Palma hasta el próximo día 14, en el marco de la vigésima exposición de la Sociedad Bonsai Balear.
Una afición, según indicó su secretario Jaume Mora, que aglutina a 50 socios en Mallorca que mantienen un contacto permanente de intercambio de experiencias y ejemplares. La especie más accesible en la Isla es eullastre dada su abundancia, del que se exhiben distintas variedades.
«Un bonsai es un ser vivo y su cuidado requiere tiempo, pinzar de forma adecuada (esto es quitar las puntas), defoliar (o separar las hojas más pequeñas), así como recibir una cantidad adecuada de sol, agua y abono. Sólo con una atención permamente se puede asegurar una larga vida al árbol, ya que puede morir al menor descuido, sobretodo en condiciones extremas de temperatura», asegura Mora, junto a Bartomeu Bauçà, con 22 años en la asociación y Joan Matas, otro socio con larga experiencia en su cultivo.
A lo largo del espacio elíptico que describe el claustro de Sant Antoniet se suceden interesantes ejemplares de acebuche, almendro, pino, carpe, arce, olmo y romero que alternan su estampa vegetal con las suiseki, las características piedras japonesas que adoptan distinta morfología en simbiosis estética con estos vegetales, sembrados por regla general en tierra de akadama, tambien de origen nipón.
Una cuestión que siempre llama la atención, indican los socios, es el tema de la edad del árbol, difícil de precisar dado que si bien el tiempo de cultivo de los ejemplares expuestos puede oscilar entre los 3 y los 15 años, su longevidad puede alcanzar o superar el siglo de vida. Aspecto que se observa a simple vista a tenor del desarrollo y morfología que muestran algunos ejemplares cuya imagen representa a escala miniaturizada la del árbol grande en su fase adulta.
La Sociedad Bonsai Balear, indican sus socios, es la más antigua de las Illes Balears y una de las más antiguas de España. Desde su fundación han mantenido múltiples encuentros que han alternado con la tradicional exhibición anual en el espacio actualmente cedido por el BBVA y que por sus características permite disfrutar de una perpectiva panorámica del conjunto de «árboles en maceta» que es la traducción literal de la palabra japonesa 'bonsai'.
Gabriel Alomar