MONICA GONZALEZ
El PSIB-PSOE defiende que la Ley Orgánica de Educación (LOE) no perjudica a las familias numerosas en el proceso de adjudicación de plazas escolares al imponer que a partir de este año se tenga en cuenta la renta anual de la unidad familiar, que no tiene en cuenta en número de hijos, en lugar de la renta per cápita de la unidad familiar que introdujo la Conselleria d'Educació en el curso 2004-05.
«La Ley establece un marco muy general, pero son las comunidades autónomas las que determinan la puntuación que se le da a cada criterio», explicó Bárbara Galmés, número cuatro de la candidatura del PSIB-PSOE al Parlament, para quien la LOE una vez asegurada una plaza en un centro público o concertado para cada niño o niña «prioriza otros criterios, como el tener hermanos o padres en el centro, o la proximidad del domicilio familiar o de trabajo». Por eso, Galmés consideró que «la Conselleria d'Educació ha entendido muy bien el espíritu de la LOE al rebajar la importancia de la renta, pues mientras antes se daban 3 puntos a las rentas más bajas, en la nueva baremación reciben sólo 1,5».
En cambio, se ha reforzado la puntuación de criterios como la antigüedad en la zona de residencia o de trabajo, tener hermanos o padres en el centro o que haya una incapacidad en la familia.
Desde Educació se justificó el cambio de renta exigida en la obligación de cumplir con la LOE.