Coincidiendo con el final de la Semana Santa, que si ha destacado por algo ha sido por la carencia de noticias glamourosas, llegó la noticia glamourosa: el príncipe Enrique de Dinamarca está en la Isla. El marido de la reina Margarita, que llegó ayer a primeras horas de la mañana a los pantalanes del RCN de Palma, se puso al mando deWhite Lady al que dirigió al campo de regatas donde, a partir de mediodía de ayer, dio comienzo la Dragon Gold Cup.
Enrique de Dinamarca, nacido Henry de Montpezat el 11 de julio de 1934, hijo de André de Laborde de Montperzat y de Renata Doursenot, criado en Indochina francesa, donde su padre tenía intereses empresariales, y casado con la reina Margarita II de Dinamarca desde hace 40 años (la boda se celebró en la catedral de Copenhage el 10 de junio de 1967), se lamentó recientemente de que por qué no puede él ser rey de los daneses. ¿Acaso la esposa del rey no obtiene automáticamente el título de reina? Y es que el príncipe Enrique, que también confesó que no le importaba ser el número dos de Dinamaca, no quiere verse ahora degradado a la tercera posición, pues la «dos» es de su primogénito. Cuentan que los primeros sorprendidos ante estas declaraciones que hizo a Point de vue, fueron su esposa, Margarita, y su primogénito, Federico. Pese a ello, la reina declaró recientemente que «somos un matrimonio feliz».
Esta mañana, el príncipe Enrique tendrá oportunidad de saborear el auténtico aceite de Mallorca, ya que los participantes de la Dragon Gold Cup han sido invitados a una degustación de dicho producto tan nuestro.
Pedro Prieto
Fotos: Click
El príncipe de las mareas
Enrique de Dinamarca regatea desde ayer en la Dragon Gold Cup que se disputa en aguas palmesanas