Eberhard Grosske y Nanda Ramón, cabezas de lista del Bloc per Mallorca al Ajuntament de Palma, fueron ayer los guías ocasionales que dieron a conocer la que ha sido dada en llamar la Ruta dels Desbarats o ruta de los desastres. Una crítica a la política urbanística del Gobierno municipal liderado por la alcaldesa de Palma Catalina Cirer.
El recorrido, «no todo lo extenso que debería, ya que lo hacemos a pie», afirmó ayer Nanda Ramón pretende explicar a los asistentes «los destrozos realizados en algunos relevantes lugares y edificios de Palma y las propuestas de nuestra formación para corregirlos».
Así, los candidatos del Bloc per Mallorca denunciaron una serie de «desastres» llevados a cabo en las Torres del Temple, donde denuncian que «no se han respetado las medidas de protección y las directrices establecidas». Del «desastre» acometido en el portal del Mirador y el portal Major de la Seu, el Bloc denuncia que «en lugar de garantizar su conservación ponen en peligro la integridad de las obras».
Sobre los aparcamientos de Antoni Maura, denuncian la «falta de respeto y metodología arqueológica».
De la Gerreria sostienen: «Se ha perpretado una gran aberración urbanística justificada en la especulación y la limpieza social de la zona».
Sobre la síquia d'en Baster y la síquia de la Villa en Son Espases, dicen: «Son Espases y el Velódromo han causado importantes daños a elementos de ingeniería hidráulica tradicionales...»
Con ocasión del acto de ayer, el Bloc per Palma presentó la publicación editada por la citada formación titulada asimismo La Ruta dels Desbarats que profundiza en el tema, publicada en la web del Bloc.