El pleno municipal de ayer aprobó de forma definitiva, con el voto a favor del PP, la abstención del PSOE y el voto en contra de EU-EV y el PSM, el Pla Municipal per a la Igualtat d'Oportunitats entre Dones i Homes, que ha sido impulsado por la Regidoria de Serveis Socials, que dirige la regidora popular Margalida Ferrando, y ha sido elaborado con la participación de todas las concejalías, además de contar con la implicación y la colaboración de otras instituciones y entidades.
El plan tendrá una vigencia de tres años, y su presupuesto total asciende a 18.614.976 euros. Este plan municipal contará con cuatro líneas estratégicas de actuación: institucional, de fomento de la igualdad de oportunidades, de trabajo en condiciones de igualdad y de erradicación de la violencia ejercida contra las mujeres. Además, se basa en los valores de innovación, transversalidad, colaboración, pluralidad y diversidad, participación y universalidad. «Nuestro deseo es que este plan sea un instrumento válido que pueda servir para mejorar la igualdad real entre hombres y mujeres», destacó Ferrando.
A lo largo de esta legislatura, el Ajuntament ha aprobado, cumpliendo el compromiso asumido por la edil en febrero del pasado año, los tres planes municipales previstos por Serveis Socials, el Pla Municipal sobre Drogodependències, en vigor desde diciembre de 2005, el Pla Municipal sobre la Immigració i la Convivència, en vigor desde enero de este año, y el Pla Municipal per a la Igualtat d'Oportunitats entre Dones i Homes, que había sido aprobado de forma inicial en el pleno municipal del pasado 25 de enero.
La mayor parte del debate que tuvo lugar ayer sobre dicho plan se centró en las alegaciones presentadas en febrero, en el segundo periodo de exposición pública, por parte del Col.legi Oficial de Psicòlegs de les Illes Balears (COPIB) y del Lobby de Dones, que fueron rechazadas por el equipo de gobierno, hecho que provocó la crítica de la edil de EU-EV Marisol Fernández y de la edil del PSM Aina Gelabert, y que fue el motivo principal por el que ambos grupos cambiaron el sentido de su voto con respecto a la aprobación inicial del plan, en que se abstuvieron. La edil del PSOE Cristina Ferrer también lamentó que no fueran aceptadas dichas alegaciones, si bien su grupo mantuvo la abstención que ya expresó en el pleno de enero, al considerar positiva la existencia del plan.
Fernández afirmó ayer que el citado plan «está hecho de espaldas a la participación», e hizo referencia a las críticas que, en este sentido, hizo el COPIB al hablar de la línea institucional. Asimismo, dijo que el presupuesto de 18,6 millones de euros «es poco creíble». En el mismo sentido se expresó Gelabert, quien dijo que el plan «no refleja la realidad».
Ferrando lamentó el cambio en el sentido del voto de EU-EV y del PSM, y señaló que si las alegaciones fueron rechazadas «no fue por una cuestión política», sino porque el equipo de gobierno no estaba de acuerdo con las mismas y porque cree más correcta su visión sobre determinados puntos. En este sentido, indicó que el Pla per a la Igualtat considera que «hay acciones que tienen que basarse en la sensibilización», ante la desigualdad aún existente entre hombres y mujeres. Además, dijo que, aun así, sí se tuvieron en cuenta aportaciones hechas por el COPIB, como una relativa a que en un capítulo se considera más correcta la expresión 'género' que no 'sexo'.
Por lo que respecta al presupuesto, afirmó que se cumplirá, y añadió que podría aumentarse en un futuro. En este sentido, hizo referencia al Pla Municipal sobre Drogodependències, que ha visto incrementado su presupuesto tras la cesión de un solar, de forma gratuita, a Projecte Home.
Por último, expresó su satisfacción por el hecho de que por primera vez una mujer -Montserrat Casas- sea rectora de la UIB.