Cerca de 5.000 personas acudieron ayer a la concentración convocada por el Partido Popular en la Plaça de Cort para protestar contra la prisión atenuada concedida al etarra Iñaki De Juana Chaos por el Gobierno de Rodríguez Zapatero. El Ajuntament de Palma cifró en 7.000 el número de asistentes, mientras la organización la cuantificó en 3.000 y Delegación del Gobierno en unos 2.000 asistentes. La Policía Local situó la afluencia a la concentración en unas 5.000 personas.
La Plaça de Cort estaba abarrotada de personas e, incluso, varios cientos de asistentes tuvieron que seguir el acto desde las calles Colom y Palau Reial. La cúpula al completo del PP asistió a una concentración que, en esta ocasión, no contó con símbolos de ultraderecha, tal y como ocurrió la semana pasada. Por el contrario, las banderas españolas y las de Balears fueron las grandes protagonistas de un acto donde, quince minutos de comenzar, estuvo marcado por los lemas contra la política antiterrorista de Zapatero.
«ETA no, Zapatero dimisión», «Zapatero, traidor», «Esaña no se vende», «España unida, jamás será vencida» o «España merece otro presidente» fueron algunos de los lemas que se utilizaron durante el acto. La organización repartió también pequeñas banderas del PP. El president del Govern, Jaume Matas, se situó delante de una pancarta donde podía leerse «España, por la libertad, no más cesiones a ETA».