MARIA QUES
El Govern admitió ayer que no adjudicó la construcción del futuro hospital de referencia de Son Espases al grupo de empresas OHL porque la Mesa de contratación no fue «transparente» en su trabajo de valoración.
Un portavoz autorizado de la Conselleria de Salut afirmó ayer a este periódico que «la Mesa de contratación decidió salvaguardar la objetividad, transparencia e imparcialidad del proceso de selección». Por esta razón, el mismo día que iba a anunciar quién era el ganador del concurso (el pasado 21 de julio), decidió enviar todo el expediente al Consell Consultiu para que informara si el procedimiento se ajustaba a derecho. En aquellos momentos, el grupo de empresas liderado por OHL -bajo la presidencia de Juan Miguel Villar Mir- era el que reunía la máxima puntuación.
El dictamen del Consultiu recomendó que se pidieran informes a los colegios de Ingenieros y de Economistas. Una vez que fueron emitidos, la decisión de la Mesa de contratación cambió de manera radical porque la adjudicación recayó en la UTE que encabeza Dragados, presidida por otro conocido empresario madrileño: Florentino Pérez.
La consellera de Salut, Aina Castillo, convocó una rueda de prensa el pasado 7 de diciembre con los presidentes del ambos colegios, Carlos Garau y Esteban Bardolet. Entonces anunció el nuevo ganador.
A pesar de las alusiones a la necesaria transparencia del proceso, el Govern niega que los medios de comunicación puedan tener acceso a los informes colegiales que dieron el giro al concurso. Fuentes de la Conselleria explicaron que «forman parte de un proceso administrativo que aún está marcha».
El informe de los ingenieros está firmado por la junta directiva, y el de los de los economistas por tres colegiados. Sus nombres no han sido dados a conocer.
El nuevo hospital debe construirse en 44 meses. Dragados se ha comprometido a hacerlo por 635 millones de euros. El Govern pretende poner la primera piedra el mes que viene.