El PSIB se sumó ayer a la moda de los videos políticos contra los partidos rivales y presentó anoche, durante la cena navideña de los socialistas, un duro alegato contra el PP centrado en la corrupción y, concretamente, en el «caso Andratx».
La utilización de ese recurso visual generará, seguramente, polémica (como sucedió con el video de CiU sobre el tripartito o el de la FAES de Aznar sobre el 11-M) pero su emisión fue la gran sorpresa de la cena celebrada en el Casino. Los socialistas contraponen en su vídeo imagenes de Matas y el portavoz del PP Miquel Ramis (en blanco y negro) con la «esperanza» de Zapataero y los socialistas de las Islas.
Los sucesos de Andratx se convirtieron en protagonistas de la cena-mitin de ayer que sirvió, también, para «recuperar» al Antich de sus buenos momentos. Cierto es que el ex president y candidato se ganó al público con una «glosa» navideña sobre Andratx, pero también lo es que se mostró bastante ingenioso e irónico. Casi resultó anédótico lo que, de entrada, se presentaba como el plato fuerte de la noche: la intervención del ministro de Administraciones Públicas, el valenciano Jordi Sevilla.
Los socialistas estaban anoche animados. Aún quedan unos meses para las elecciones, y para comprobar si finalmente se concretará el «cambio» también en Balears pero, ayer algunos socialistas ya empezaron a celebrarlo. Incluso con elementos ajenos, hasta ayer, a sus celebraciones, como una tamborada que rompió el escenario del casino antes del inicio de los discursos y la proyección del video.
Un vídeo, en parte dramatizado, donde se muestran fajos de billetes pasando de mano en mano, ladrillos y portadas de los periódicos con titulares relativos a Andratx.
El ministro Sevilla apenas hizo alusiones a Balears, salvo destacar que el cambio es posible y necesario.
El «fuego» discursivo lo abrió el candidato por Calvià, Antoni Manchado, que pidió un alcalde «al que no le guste ir al Rasputín», en referencia al prostíbulo moscovita que visitó una delegación balear.