«Los dos acontecimientos cumbres de la vida familiar son el matrimonio y la muerte, que abre la sucesión», afirmó el magistrado de la Sala de lo Civil y Penal del TSJB, Antoni Monserrat, en el discurso que pronunció en su ingreso en la Acadèmia de Jurisprudència y Legislació de Balears. «Ambos (el matrimonio y la muerte) están íntimamente ligados en la vida y por tanto también en el Derecho. El primero, como augurio de la perpetuación vital, y el segundo, como augurio de la perpetuación patrimonial», precisó Monserrat.
El ingreso de Monserrat (Palma, 1947) a la Acadèmia coincidió con la apertura del curso 2006-2007 de esa entidad, en un solemne acto celebrado en el Colegio de Abogados de Balears, al que asistieron numerosas personalidades, entre ellos, el presidente del Govern, Jaume Matas, y la alcaldesa de Palma, Catalina Cirer. El nuevo académico pronunció el discurso «Negocios de disposición patrimonial por razón o con ocasión del matrimonio», y le contestó Jaume Ferrer Pons. El presidente de la Acadèmia de Jurispridència, Eduardo Martínez Piñeiro, dio la bienvenida a Antoni Monserrat destacando su extenso currículum y méritos profesionales contraidos tras 30 años de intensa actividad. El salón de actos del Colegio de Abogados acogió a numerosos compañeros de Monserrat y destacados juristas, quienes quisieron acompañarle en un día especialmente significativo para él. Entre ellos, el presidente del TSJB, Antoni Terrasa, el abogado y vicesecretario de la Acadèmia, Rafael Perera, la vicedecana del Colegio de Abogados, Celia Pita (el decano, Joan Font excusó por carta su ausencia debido a que tenía compromisos ineludibles en Bruselas), el presidente de la Audiencia de Palma, Carlos Gómez, el juez decano de Palma, Francisco Martínez, el presidente honorario de la Acadèmia, Miquel Coll Carreras, el abogado Miguel Coca, el ex decano de los letrado Lorenzo Ros, los magistrados del TSJB, Javier Muñoz (que revisó el discurso de Monserrat en su calidad de censor de la Acadèmia) y Miquel Massot.